Con el poder del streaming ahora podemos saltar de una canción a otra, de un género a otro, con tan solo apretar un botón. Sin embargo, aquí en #ruexmag aún nos gusta disfrutar de vez en cuando de la experiencia de escuchar un álbum de principio a fin, en el orden en que el artista lo planeó.
Esta es una colaboración de Jozz Fernández para la sección de Música
Es por esto que te presentamos discos que nos han cautivado desde la pista número uno hasta el último segundo para que los escuches ya sea en un road trip o en la oficina. Esta semana te presentamos Obrigaggi de Diles que no me maten.
Obrigaggi | Diles que no me maten | Rock Alternativo | 2023 | 8 Canciones | 39:38 min
En la vasta sinfonía de la Ciudad de México, entre el bullicio de las calles y los latidos de una urbe caótica que nunca se detiene, resuena un eco distinto, una cadencia que emerge del abismo y nos empapa de el. Diles Que No Me Maten, la banda independiente forjada en el año 2017 en las entrañas de esta metrópolis, se ha ganado en cuestión de poquísimo tiempo un lugar sólido en la escena musical under mexicana debido en gran parte a su habilidad para pintar paisajes sonoros minimalistas y filosóficos que nos permiten explorar como individuos nuestras vivencias en la jungla de asfalto.
Diles que no maten lanzó este 24 de octubre “Obrigaggi” de la mano del sello independiente COME ALGO. El disco está compuesto por ocho temas en el que la conversación con las sombras citadinas y sus claroscuros prevalecen, pero está vez con un giro más íntimo, contemplativo y conectado con lo bello de la naturaleza.
Si bien, el crecimiento desde su anterior material “La vida de alguien más” del 2021, les permitió configurar un álbum con variaciones en los que encontramos obvios escapes al bullicio urbano y hasta polvo de estrellas, en Obrigaggi, nos vamos adentrando lentamente hacia una narración que busca potenciar las texturas entre visiones, encuentros y muestras de amor.
Canciones favoritas: Obrigaggi | 1/2 día | Pajaritos | Derrumbes
El intro, “6:15” es una envolvente pieza de sintetizadores que nos eleva suavemente y deja el paso despejado. “El Circo”, misterioso pero calmo tema que nos invita a sumergirnos en un ambiente nostálgico, en el que la constante de la guitarra acústica y los susurros de Jonas despiertan emociones dormidas: “Quiero volver”, las palabras resuenan entre el apagón de la melodía, la naturaleza de pronto, manifestándose, luciérnagas y un cierre melancólico nos besa efímero.
“Obrigaggi”, que da nombre al álbum y nos fue presentado como el primer adelanto oficial en su sesión KEXP, se traduce como una caricia empleando todos los sentidos, suave y con marcados elementos de free jazz, Obrigaggi destila amor en toda la expresión de la palabra, incluso más allá de lo que no podemos describir.
El punto de inflexión se da en “Cuando el sueño se rompió” que llega de a poco, pero es intenso. El bajo y los sintetizadores encuentran su contrapunto y se entrelazan para crear una letanía de pensamientos, gritos internos, tal cual, un sueño rompiéndose mientras la vida avanza. Con “Radio Sonora”, Jonás da forma a una crónica citadina, la rutina del ciudadano promedio, ese que somos tú, yo, nosotros; enterándonos de los pormenores atroces y usuales en la cotidianidad, yendo del centro de la urbe a las periferias mientras contemplamos con ojos apagados. La voz sobrepuesta de Jonas quien se convierte en un Juglar moderno, acompañado de guitarra acústica, le dan personalidad a este tema de tintes country y folk.
Hasta lo ahora dicho y escuchado, podemos asegurar que el corazón del disco radica en “1/2 día” que se enciende a través del romance, una balada con altos niveles de jazz. Es sensual, cálida, pero sobre todo, se trata de una invocación para la que cualquier descripción sobra. Lo mismo con el bello y místico “Pajaritos y derrumbes” para finalmente llegar a “La forma del esqueleto” Diles que… no pudieron elegir una mejor manera de darle cierre a este álbum: es sublime y altamente sensorial. La parte instrumental combina ritmo desde todos los medios posibles, además de melodía perfectamente llevada. Si ponen atención, es casi al final que los huesos pueden ser encontrados.
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Queda claro que la banda se impregnó de la influencia de Hugo Quezada, con quién trabajaron en “La vida de alguien más”, amen del sello característico de Diles que no me maten, pues las piezas del nuevo disco siguen siendo obras sorprendentes con toques minimalistas, lo que podría traducirse en mayor espacio para sentir.
También cabe remarcar el uso de instrumentos de distintas familias con recursos como ostinatos, improvisaciones y contrapuntos melódicos, logrando, como siempre, un sonido distinto a cualquier género, pues vaya, a estas alturas la banda es su propio género.
Obrigaggi es una experiencia emocional que nos invita a explorar los recovecos de nuestra alma y a abrazar el amor en todas sus formas. Un regalo musical que toca el corazón con la intención de transformar la cotidianidad en algo extraordinario y eso, al final es parte del todo.
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